A menudo, en el universo de los ascensores, nos asaltan dudas en torno a ellos. Es lógico, debido a que es un mecanismo que guarda múltiples características que son desconocidas. En este artículo, sacaremos las dudas en torno a si está permitido el uso de un montacargas como ascensor.
La ley prohíbe la modificación de un montacargas para convertirse en un elevador
Un montacargas, nunca se va a poder utilizar como un ascensor, ya que se ha diseñado exclusivamente para transportar cargas y no a personas. De esta manera, encontramos cómo la ley prohíbe de forma tajante cualquier tipo de intento de modificar un montacargas para poder transformarlo en un ascensor.
La realidad, es que la seguridad de los montacargas que conocemos hoy en día, ha ido evolucionando a largo de los últimos años, pero a pesar de ello, actualmente todavía no alcanzan los requisitos para garantizar la seguridad de las personas.
Este tipo de requisitos y no son cumplidos por parte de los montacargas y un ejemplo de ello es la falta que hay de pulsadores de llamada en el interior de la cabina del montacargas. Un elevador sí que puede utilizarse para transportar mercancías, siempre con sentido común. Si bien es cierto que la Ley de Propiedad Horizontal obliga al propietario a informar al presidente de la comunidad de la realización de obras en el interior de la vivienda, existe ausencia de ley que prohíba utilizar el ascensor de la comunidad para transportar en caso de reformas, materiales y escombros de las obras. Se podrá hacer uso de él siempre que la junta de propietarios no se oponga y lo prohíba.
En caso de exceso de carga, podría haber averías con responsabilidades en el propietario
A pesar de que está permitido, siempre se tiene que tener presente que el ascensor no se diseña para transportar mercancías pesadas, sino personas y artículos que sea ligeros. Por ese motivo, en caso de que se le dé este tipo de uso, hay que recubrirlo para evitar desperfectos, teniendo en cuenta el peso que se introducirá en la cabina del elevador.
En caso de que exista un exceso de carga, podría dañarlo y en caso de que hubiese avería por un uso inadecuado, la responsabilidad recaerá en el propietario de los deterioros que haya sufrido, con lo que tendrá que hacer frente a las reparaciones que sean necesarias y a los imperfectos que hubiese ocasionado en algunas zonas comunes.
Evidentemente, no hace falta señalar la importancia que existe acerca de las normas básicas de convivencia para preservar el mantenimiento óptimo de los ascensores y el bienestar de la comunidad.
En caso de que se lleven obras en nuestra vivienda, debemos asegurarnos de dejar el edificio en el mismo estado en el que estaba antes de que se hiciesen las reformas, incluyendo la limpieza de zonas comunes. Es aconsejable que, una vez hayan concluido las obras, se contacte con una empresa de mantenimiento de ascensores para que un técnico pueda verificar que todo funciona correctamente.